martes, 30 de junio de 2009

Un cariñoso SOL de invierno



Tengo un amigo que es un sol
un sol de invierno hay que aclarar,
alegra mi alma,
no hace que hierva mi sangre

Pero siendo él un sol, y yo una gata con frío
decidí llamarlo después de varios meses,
como siempre encantador ... sanador
-me curó del resfrío solo hablándome 2 días seguidos casi sin parar-

Él le dice a su pija "el jefe",
y como buen jefe, es un bueno para nada,
flojo como ninguno, le gusta que le hagan todo,
caprichoso, no se Erecta porque prefiere estar Echado,
mi amigo así se desliga de la responsabilidad de estar siempre dispuesto, y hace bien

A mi me da igual,
mi amigo es un sol,
yo le hago cariño en su espalda para que duerma como un bebé
nos damos algunos besitos
solo unos pocos,
y dormimos abrazados sin tener sexo, y creo, sin siquiera desearlo
él, es una de esas personas, que hace que me sienta feliz, sin necesidad de follar

Pero no soy de fierro, y tanto mimo me tenía caliente,
nos separamos algunas horas para hacer unos trámites
y mi trámite consistió en llamar al amigo caliente y siempre dispuesto más cercano,
un amigo que no es un SOL,
pero cuyo "jefe" atiende perfectamente mis deseos, mis necesidades,

Follamos deliciosa y calientemente, todo muy rápido,
y cuando ibamos a ir a cenar, hambrientos tras el ejercicio amatorio
me llama mi amigo El Sol, quién me pasa a buscar, y me voy con él,
-si, si, me fuí con quién NO iba a tener sexo, claro que si!!-
cosa que a mi otro amigo objeto-sexual, no le pareció nada bien

Como sea,
así ya más tranquila,
me dispuse a pasar otra tarde encantadora con ese sol que me alimenta,
donde nos transparentamos
armamos proyectos
lloró junto a mi,
lo consolé
lo abracé
me aconsejó
me reprendió
rasqué su espalda y lo acaricié hasta que se durmió como un leoncito junto a mi
él rugía feliz
y yo sonreia ensoñándome plenamente satisfecha

pd = El video es una puesta de sol de invierno en Punta del Este, Uruguay

2 comentarios:

depra666 dijo...

el sexo es bueno para sacar la angustia,pero no se compara con sentirse seguro en otros brazos...

Patricia dijo...

Me has vuelto una adicta a ti, Lady Morbo. A mi también me gustan los leoncitos durmiendo en mis brazos. Pero tú eres tan abierta de mente...!

Tu fiel admiradora.